Curiosidad en Laboratorio de una Escuela Mató a Cuervos, Petirrojos y Gorriones

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Actualización: 16 de febrero de 2022
¡Excelente noticia! PETA acaba de obtener documentos del estado de Colorado que muestran que, en 2021, el experimentador y atormentador de aves de la Universidad Estatal de Colorado (CSU), Gregory Ebel, mantuvo sus manos lejos de las aves, incluidos los cuervos, los petirrojos y los gorriones. Los horrendos experimentos de Ebel, para los que secuestra aves saludables de sus hogares naturales, las infecta con el virus del Nilo Occidental y luego las mata, no han ayudado a las aves ni a los humanos a lograr avances contra la enfermedad.

Actúa a continuación para decirle a CSU que quieres que este cambio sea permanente.


Actualización:
En respuesta a una demanda legal y solicitud de investigación hechas por PETA, Colorado Parks and Wildlife (CPW) citó y multó a Gregory Ebel de la Universidad Estatal de Colorado (CSU) y suspendió su licencia. Sin embargo, nuevos documentos obtenidos por PETA revelan que antes de que CWP rescindiera su licencia, Ebel había capturado 32 petirrojos americanos para infectarlos con el virus del Nilo Occidental. PETA está pidiéndole al organismo que incaute los petirrojos que hayan sobrevivido del laboratorio de Ebel y los envíe a una instalación reputada de rehabilitación de fauna.

Ebel estuvo 13 años capturando cuervos y otras aves en la naturaleza, manteniéndolos cautivos en su laboratorio, infectándolos con el virus del Nilo Occidental y asesinándolos, pero no pudo desarrollar una cura, vacuna, o tratamiento clínico para la enfermedad, ni en aves ni en humanos. Los cuervos son animales muy inteligentes y sensibles, que valoran su libertad, sus vidas y a sus familias.

 

Los documentos obtenidos por PETA revelan también que Ebel está ahora echando mano a los cuervos y petirrojos con la ayuda de su colega experimentador de la CSU, Richard Bowen, quien tiene su propia licencia de captura. Además de infectar aves con virus y bacterias mortales, Bowen captura ardillas zorro, ratones ciervo y conejos de cola de algodón para sus propios experimentos dolorosos y mortales. Al igual que los de Ebel, sus experimentos no apuntan al desarrollo de tratamientos para enfermedades infecciosas, sino que solo están motivados por la curiosidad. Estos experimentos financiados con el dinero de los contribuyentes causan estragos en la fauna y desvían dólares de la salud pública a experimentos sin sentido.

PETA hace un llamamiento a la CSU para que termine con los experimentos de Ebel. También presentamos una queja al Departamento de Agricultura de EE. UU. tras determinar que la universidad no incluyó a las aves que fueron capturadas, usadas y asesinadas por Ebel en sus informes al gobierno federal, como lo requiere la ley.


Publicación original:
Los experimentadores en la Universidad Estatal de Colorado (CSU), dirigidos por Gregory Ebel, están utilizando el dinero de los contribuyentes para atrapar cuervos y petirrojos americanos y gorriones comunes. Los infectan con el virus del Nilo Occidental (WNV, por sus siglas en inglés), observan cómo desarrollan síntomas por la infección y los matan. Tan solo el confinamiento les ocasiona un tremendo estrés a las aves atrapadas, y esto se agrava cuando les inyectan cepas del WNV y los someten a múltiples extracciones de sangre, incluyendo de sus venas yugulares.

Mantienen vivas a las aves mientras el virus llega a los órganos mayores (pulmones, corazón, hígado, riñones, bazo y el sistema nervioso central). Es probable que presenten fiebre, pierdan el apetito y tengan dificultad para controlar sus movimientos corporales. Algunas especies, incluyendo los cuervos americanos, experimentan infección sistémica en todo el cuerpo, seguida de una falla orgánica masiva y la muerte.

El WNV ha tenido un impacto devastador en las poblaciones de aves, particularmente en las de los cuervos americanos. Pero el propósito del trabajo de Ebel no es desarrollar una vacuna o tratamiento para el virus, ni ganar nuevos conocimientos en estrategias de prevención. Más bien, estos experimentos impulsados por la curiosidad están dirigidos al entendimiento del comportamiento del virus en diferentes especies portadoras como cuestión académica.

Estos experimentos no ayudan a las aves o a los humanos: Ebel reconoció que los mecanismos virales (la severidad con la que un virus ataca al huésped (virulencia) y su capacidad para causarle una enfermedad (patogenicidad)), difieren radicalmente entre las especies de aves. Por ejemplo, los cuervos americanos son altamente susceptibles y experimentan altos índices de mortalidad a causa del WNV, mientras que los petirrojos americanos son susceptibles al virus, pero presentan bajos índices de muerte. Estos mecanismos también son diferentes en los humanos.

Además, el WNV puede controlarse al eliminar los sitios de reproducción de mosquitos. Pero Ebel ha recibido más de $4.2 millones de dólares de los Institutos Nacionales de la Salud desde 2007 para conducir estos experimentos, por lo tanto continúan.

Las aves atrapadas, atormentadas y asesinadas por los experimentadores de la CSU valoran su libertad, sus familias y sus vidas. Una creciente colección de evidencia documentó que los cuervos son seres profundamente sociales de inteligencia notable. Son capaces de resolver problemas complejos, entender analogías, usar herramientas, retrasar la gratificación y reconocer rostros humanos, distinguiendo entre amigos y enemigos (como Ebel).

Por favor, dile a CSU que termine con los crueles e inútiles experimentos de Ebel.

Escribir el asunto y la carta con tus propias palabras ayudará a atraer la atención a tu correo.

Dr.
Alan
Rudolph, Ph.D.
Colorado State University

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