Dile a este Gigante Farmacéutico que Prohíba las Pruebas de Casi Ahogamiento

Para tantos humanos que viven con depresión, los tratamientos que actualmente se encuentran disponibles son inadecuados. A veces no funcionan, o si lo hacen, generan efectos secundarios insoportables. Los expertos han afirmado que las arcaicas pruebas en animales son una de las razones principales por las que los fármacos antidepresivos fracasan más del 90% de las veces antes de llegar al mercado.

Es por eso que, muchas de las principales compañías farmacéuticas del mundo han prohibido una prueba en particular: la prueba de nado forzado. Tras conversaciones con PETA, Johnson & Johnson, Bayer, GlaxoSmithKline, AbbVie Inc., Roche, AstraZeneca, Novo Nordisk A/S, Boehringer Ingelheim, Pfizer y Bristol Myers Squibb han anunciado que no seguirán conduciendo ni financiando la prueba de nado forzado.

Sin embargo, el gigante farmacéutico Eli Lilly –cuyos productos incluyen Prozac, Cialis, Trulicity y Humalog– se aferra desafiante a esta ciencia absurda que atormenta y asesina a los animales, pretendiendo que de alguna manera predice la depresión humana. No lo hace, pero la compañía ha llevado a cabo el experimento a pesar de la evidencia que demuestra que no es más predecible que lanzar una moneda.

Ejerzamos la fuerza del libre mercado y hagámosle saber a Eli Lilly que es tiempo de prohibir el tormento de animales en las pruebas de nado forzado.

Así es la prueba: los experimentadores a menudo suministran a ratones, ratas, conejillos de indias, hámsteres, o jerbos una dosis de una sustancia de prueba. Después, los colocan en contenedores de agua sin escapatoria. Los animales en pánico se desesperan por escapar, intentando escalar por los costados del vaso para salir, o sumergiéndose bajo el agua para buscar una escapatoria. Patalean furiosamente, intentando desesperadamente mantenerse a flote. Eventualmente, comienzan a flotar.

Y eso es todo. Eso es lo que, de alguna manera, debe proveer algún indicio sobre la depresión humana. Pero la prueba de nado forzado puede inducir a error a los experimentadores puesto que sugiere que algunos fármacos podrían ser antidepresivos cuando en realidad no lo son (como la cafeína), y pueden pasar por alto el potencial antidepresivo real de otros fármacos, siendo dejados de lado sin llegar nunca a los pacientes. Simplemente no funciona, y aterran a miles de animales sin ninguna necesidad.

Incluso el fármaco mejor vendido de Eli Lilly, el Prozac, no ha arrojado resultados consistentes a partir de la prueba de nado forzado.

Por favor, dile a la compañía que es momento de que ingrese al siglo XXI y que excluya el tormento de animales en pruebas fraudulentas que no ayudan a nadie.

Por favor, únete a nuestro llamado si usas alguno de estos productos, pero no dejes de tomar la medicación que te ha recetado tu médico:

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