Corrales hacinados y desoladores llenos de cangrejos ermitaños muertos y de pinzas desprendidas. Miles de sobrevivientes montándose unos encime de otros, buscando desesperadamente agua o un lugar para esconderse. Trabajados rompiendo los caparazones de cangrejos vivos, dejando al descubierto sus delicados cuerpos. Cangrejos vivos arrojados entre los muertos.
Probablemente este no es el contexto que esperarías para los miles de caparazones coloridos –de los que cada uno contiene a un diminuto crustáceo– que están a la venta en las tiendas que bordean el malecón de la playa en tus vacaciones de verano. Pero, tras recibir una pista perturbadora acerca de Brelean Corporation, un autoproclamado proveedor de cangrejos ermitaños en cautiverio para PetSmart, Petco, y otros minoristas, PETA investigó más de cerca. Pocos días después de la publicación de este video, PetSmart afirmó que uno de sus proveedores rompió toda relación comercial con Brelean.
Arrebatados del paraíso, arrojados en corrales inmundos
Cada año, cientos de miles de cangrejos ermitaños del Caribe y de Ecuador –quienes no se reproducen fácilmente en cautiverio– son arrebatados de playas tropicales y destinados a las tiendas de los malecones y las estanterías de las tiendas de mascotas. En Brelean, el testigo de PETA encontró que traían a miles de cangrejos atrapados en la naturaleza –y los dejaban durante la noche– en hacinados costales de lona.
A continuación arrojaban a los cangrejos ermitaños en corrales tan hacinados que muchos quedaban enterrados debajo de montones de otros cangrejos, incapaces de comer o beber. En lugar de vivir en las costas de arena, los cangrejos ermitaños fueron obligados a vivir en pisos desoladores de madera contrachapada, sin ningún lugar para esconderse ni excavar, actividades vitales para el bienestar de los cangrejos ermitaños.
Los trabajadores no hicieron ningún intento evidente por medir los niveles de humedad en los corrales, a pesar de que los cangrejos ermitaños tienen dificultad para respirar e incluso se pueden asfixiar cuando el aire es demasiado seco. Cuando se les ofrecía agua, los cangrejos sedientos la pedían con ansias, pero a estos habitantes de las costas nunca se les dio acceso al agua salada que es crucial para su bienestar.
Cangrejos vivos botados, cientos más muertos
Los cangrejos ermitaños pueden vivir por décadas en su hábitat natural, pero en Brelean, se encontraron cientos de cangrejos muertos todos los días. Los trabajadores barrían a los cangrejos para amontonarlos, diciendo que los sobrevivientes eventualmente treparían y saldrían de entre los muertos. Sin embargo, cangrejos vivos fueron arrojados en la basura junto con los muertos.
La administración aparentemente no hizo nada para reducir la elevada tasa de mortalidad. El dueño simplemente se refirió a la cantidad de cangrejos muertos como un “pérdida de dinero”.
Caparazones destrozados, dejando a los cangrejos indefensos y vulnerables
Cuando están en peligro, los cangrejos ermitaños se refugian dentro de sus caparazones, los cuales protegen sus suaves abdómenes. Sin embargo, los trabajadores de Brelean destrozaron sus caparazones para abrirlos con una palanca de presión manual, dejándolos vulnerables e indefensos. A muchos cangrejos frenéticos se les dio a continuación solamente caparazones “elegantes” cubiertos con pintura –que puede ser tóxica– para que se introdujeran en ellos antes de ser enviados a los consumidores.
El testigo vio cangrejos a quienes les faltaban partes de su abdomen. Incluso se encontraron cangrejos vivos en un recipiente de caparazones rotos destinados a la basura.
Una vida corta y miserable
Los cangrejos que sobrevivieron su miserable estadía en el almacén de Brelean, fueron arrojados por centenares en costales de lona, los cuales a continuación fueron sellados con cinta y enviados para ser vendidos a tiendas de mascotas y de suvenires.
Todos los cangrejos ermitaños terrestres que son vendidos como “baratijas” en las tiendas de los malecones y en las tiendas de mascotas han sido atrapados en la naturaleza, como los de Brelean. Encerrados en diminutas cajas de plástico con tan solo una capa de gravilla y una palma de plástico, estos complejos animales nunca tendrán la oportunidad de excavar en la cálida arena de sus hábitats naturales, socializar con miembros de su colonia ni explorar la orilla de la costa de nuevo. En lugar de vivir por décadas, como lo pueden hacer en la naturaleza, los cangrejos ermitaños en cautiverio a menudo perecen a los pocos meses.
¡Tú puedes ayudar a los cangrejos ermitaños!
Brelean envía a cangrejos ermitaños, que han sido arrebatados de sus hogares costeros y mantenidos en condiciones deplorables, a tiendas de mascotas, tiendas de suvenires de playa y otros puntos de distribución. Tú puedes ayudar a detener el codicioso y maltratador comercio de mascotas al nunca comprar cangrejos ermitaños ni a ningún otro animal.
¿Te suenan familiares estos descubrimientos? Es porque lo son. Brelean es el séptimo comerciante de animales con vínculos con las grandes cadenas de tiendas de mascotas que PETA ha puesto al descubierto, tras las investigaciones con testigos en Reptiles by Mack, Holmes Farm, U.S. Global Exotics, Sun Pet y otros.
A pesar de la inmundicia, el hacinamiento, la negligencia y el maltrato que PETA ha puesto al descubierto una y otra vez, PetSmart y Petco continúan vendiendo animales, incluyendo cangrejos ermitaños, con poca consideración por sus necesidades complejas.
Por favor únete a nosotros para pedirles a PetSmart y Petco que mantengan a los cangrejos ermitaños donde pertenecen: en la naturaleza, no en las estanterías de las tiendas. Y hazles saber que vas a comprar en otros lugares hasta que dejen de vender animales.
Por favor únete a nosotros para pedirles a PetSmart y Petco que mantengan a los cangrejos ermitaños donde pertenecen: en la naturaleza, no en las estanterías de las tiendas. Y hazles saber que vas a comprar en otros lugares hasta que dejen de vender animales.