UN INT Intro Text w/ Responsive Image - *Important Note* You must UNLINK this shared library component before making page-specific customizations.
Actualizado el 24 de septiembre de 2018:
Nuevos documentos federales obtenidos por PETA por un pedido a través de la Ley por la Libertad de la Información, revela que la Universidad de Delaware violó directivas de protección animal, resultando en muertes y sufrimiento de animales. En un incidente, una rata se ahogó cuando un trabajador no estaba prestando atención suficiente. El animal era usado en la infame prueba de "nado forzado", donde los animales son colocados en vasos con agua sin escapatoria donde nadan frenéticamente para no ahogarse, tratan de trepar por los costados del vaso o se sumergen bajo el agua en un intento desesperado por encontrar una salida. En otro incidente, la experimentadora Anna Klintsova se desvió del experimento aprobado y les retuvo comida a las ratas quienes eran usadas para estudiar los "efectos del alcohol en los fetos". Los animales perdieron casi el 15 por ciento de su peso corporal en solo nueve días. En un tercer incidente, un incendio en el sistema de ventilación hizo que ingresara humo en una habitación en que 75 ratas usadas por la experimentadora Tania Roth estaban encerradas. Roth las había estado usando para estudiar el estrés y tuvo que matarlas luego de que estuvieron expuestas al humo. (Mira más acerca de los crueles experimentos de Roth a continuación.)
Tania Roth, de la Universidad de Delaware, afirma que estudia el maltrato infantil. Pero sus experimentos solamente hacen sufrir a las vulnerables y sensibles ratas. Ha colocado a la fuerza alcohol en las gargantas de las recién nacidas. Ha colocado a madres preñadas en tubos de inmovilización y las expuso a luz estroboscópica. Aterrorizó a ratas intencionalmente dándoles choques eléctricos y les ha quitado recién nacidos a sus madres y dado estos a otras ratas quienes no los pudieron cuidar.
Roth ha estado atormentando animales con dinero de los contribuyentes por casi dos décadas. Recibió más de $1,8 millones de dólares en subvenciones públicas. ¿Qué tiene para demostrar? Documentos publicados con evidentes omisiones acerca del tratamiento de estos miserables animales, sin aparentes beneficios para los bebés humanos que sufren maltrato... y una montaña de cadáveres de animales.
Ratas adultas y sensibles, y sus bebés, encerrados en el laboratorio de Roth, estaban destinados a ser atormentados en sus experimentos.
Lastimando a los más vulnerables
Desde 2000, Roth ha estado maltratando a ratas bebé para estudiar sus cambios genéticos y de conducta. En otras palabras, ella hace que los bebés animales se depriman, tengan ansiedad y miedo. Entre sus crueles y sórdidos métodos para angustiar a los recién nacidos, se encuentran:
- Inyectar opioides a las ratas bebé
- Aterrorizar a ratas bebé exponiéndolas al olor de la orina del zorro para que crean que están en peligro
- Aumentar artificialmente el nivel de la hormona del estrés cortiscosterona en ratas para asustarlas todavía más cuando son expuestas al olor de la orina del zorro
- Descargas eléctricas sobre ratas bebé
En un estudio reciente, Roth aterrorizó a ratas preñadas para ver si esto afectaba a sus bebés. Tres veces por día durante tres semanas, estos animales eran presionados dentro de tubos de PVC de solo 2,5 pulgadas de ancho y luego expuestos a luces estroboscópicas de alta frecuencia y bombardeados con ruido blanco.
En esta imagen de arriba, tomada de un artículo sobre manipulación de roedores y técnicas de inmovilización, escrito por personal de la Universidad de Notre Dame, se ve un tubo de inmovilización similar a los usados por Roth en su experimento.
Estos animales eran atormentados día y noche. Roth les quitó a las madres sus bebés al nacer y los puso con otras ratas.
En otro experimento, Roth colocó a los bebés con ratas adultas cuyos propios bebés les habían sido quitados y había intencionalmente privado a las madres sustitutas de suficientes materiales de anidación. Las madres estaban tan estresadas que abandonaron, arrastraron, ignoraron y pisaron a sus bebés sustitutos.
En otro experimento, puso a ratas en conos de plástico con forma de cuña tan pequeños que las ratas no podían moverse. Luego las colocó dentro de un contenedor de Plexiglas, lo cubrió con comida de gato y lo colocó dentro de una jaula de metal minúscula con un gato adulto, durante una hora. Con la intención de que las ratas experimentaran "actividad directa de gustativa de gato".
Esta imagen, tomada de un artículo sobre manipulación de roedores y técnicas de inmovilización, escrito por el personal de la Universidad de Notre Dame, muestra un cono de inmovilización similar a los utilizados por Roth en su experimento.
Esta imagen describe un experimento similar al que Roth condujo, donde un gato fue persuadido a lamer comida sobre un contenedor que tenía a ratas aterrorizadas dentro.
Roth también sometió a las ratas a una prueba de "nado forzado", donde los animales son colocados en vasos con agua y los experimentadores miden cuánto tiempo luchan por mantenerse flotando.
© FST.jpg | TaoPan | CC BY-SA 3.0
Un rastro de pequeños cuerpos en la estela de Roth
Roth habitualmente también mata crías recién nacidas, a quienes considera "exceso", tratando a estos bebés como equipamiento de laboratorio descartable, porque para ella, parece ser que sus vidas no tienen valor. Ella describe haber matado a algunos inyectándoles formaldehído líquido directo en el corazón, un método de asesinato no aprobado por la Asociación Americana de Medicina Veterinaria porque es considerado inhumano.
Las ratas están excluidas de la Ley de Bienestar Animal, la única ley federal que legalmente contiene estándares de bienestar animal, por lo tanto no cuentan con las mínimas protecciones que la ley ofrece. Además, Delaware exime a los experimentos en laboratorios de ser acusados por crueldad a los animales. Así que Roth puede salirse con la suya y atormentar a estos seres sociables e inteligentes que de otra forma, fuera del laboratorio, se le levantarían cargos por crueldad.
Dado que los "modelos" de depresión y estrés en animales nunca pueden igualar a las diferentes características fisiológicas y de comportamiento que los humanos con estas condiciones exhibirían, los experimentos crueles y descuidados de Roth en ratas son una pérdida de dinero de los contribuyentes.
Estamos pidiéndole a la Universidad de Delaware que termine con estas pruebas, y hacemos un llamamiento al Instituto Nacional de la Salud Infantil y Desarrollo (NICHD) que deje de financiar los experimentos de Roth.
¡Por favor, alza tu voz contra esto!
Puedes usar nuestra carta modelo, pero recuerda que escribir un mensaje y un título con tus propias palabras ayudará a dirigir la atención hacia tu e-mail.