Dile a OHSU que deje de usar cerdos vivos en la práctica de cirugía de obstetricia y ginecología

Durante años, los médicos en formación de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón (OHSU, por sus siglas en inglés) han estado utilizando cerdos vivos como sustitutos para que las pacientes practiquen cirugías como parte del programa de formación de residencia médica en obstetricia y ginecología (OB/GYN) de la escuela, según inquietantes registros públicos obtenidos por PETA.

ACTUALIZACIÓN DE CAMPAÑAS

Los registros obtenidos por PETA muestran que al menos 64 médicos residentes de obstetricia y ginecología cortaron hasta 48 cerdas vivas, diseccionaron sus órganos y realizaron otras cirugías invasivas en los animales, quienes luego fueron asesinados. Los residentes participaron en cinco simulacros de capacitación de obstetricia y ginecología con cerdos vivos entre 2019 y 2021 en OHSU, lo que convierte a la universidad en un caso atípico entre sus instituciones colegas acreditadas y fuera de sintonía con las mejores prácticas educativas.

Enviamos una queja a OHSU exigiéndoles que adopten una política pública contra el uso de animales vivos en su residencia de obstetricia y ginecología, pero los funcionarios se negaron a responder. Sin embargo, nuevos registros públicos obtenidos por PETA confirman que nuestra vigorosa campaña está funcionando. Los funcionarios de OHSU ahora afirman: "El laboratorio porcino no se realizará este año [2024] debido a la disminución del entusiasmo de la clase de jefes de residentes" y están haciendo una "revisión del departamento... para estudiar la utilidad del laboratorio porcino", resultado de lo que "determinará si continuará".

Necesitamos su ayuda para exigir que la escuela ponga fin permanentemente a esta crueldad innecesaria.

La mayoría de las facultades han avanzado

Decenas de programas acreditados de capacitación en residencia en obstetricia y ginecología, incluidos los de la Universidad de Texas A&M, la Universidad de California–Los Ángeles, la Universidad de Carolina del Norte y la Universidad de Washington, han abandonado la capacitación con animales vivos, según una encuesta en curso de PETA de los programas reconocidos por el Consejo de Acreditación de Educación Médica de Posgrado. En cambio, programas como los de Henry Ford Health, Universidad Rush y el Centro Médico Aurora Sinai usan simuladores avanzados relevantes para humanos, que son iguales, si no superiores, a la capacitación con animales vivos. Y el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG, por sus siglas en inglés) confirmó a PETA que “la programación ofrecida por ACOG no implica el uso de animales vivos o partes de animales”.

“El programa de residencia en obstetricia y ginecología del Hospital Henry Ford no usa animales con fines de capacitación, sino que usa simuladores avanzados de pacientes humanos y otros métodos sin animales”. —Residencia de Salud, Obstetricia y Ginecología de Henry Ford

Incluso el Departamento de Defensa de EE. UU. ha prohibido el uso de animales para la formación de residencia en obstetricia y ginecología y varias otras áreas de educación médica desde 2014, afirmando inequívocamente que “alternativas de simulación adecuadas pueden reemplazar el uso de animales vivos”. Además, las disposiciones éticas federales obligan a minimizar el uso de animales en experimentos y capacitación, incluida la Ley federal de Bienestar Animal.

La capacitación con animales vivos es educación deficiente

En medicina, las decisiones que salvan vidas a menudo deben tomarse en cuestión de segundos, por lo que la familiaridad con las estructuras anatómicas humanas es crucial. Los cerdos y otros animales no pueden imitar con precisión la anatomía humana. Simplemente, no son lo mismo.

Por ejemplo, los úteros de cerdas tienen una estructura completamente diferente a la de los úteros humanos. Otras estructuras clave también tienen longitudes diferentes en los cerdos y en los humanos. También existen innumerables diferencias anatómicas microscópicas entre los cerdos y los humanos dentro de cada órgano. Un entrenamiento deficiente con cerdos, como el de OHSU, no prepara a los médicos para situaciones de la vida real.

Hay mejores métodos disponibles, más baratos y en uso

Hay simuladores humanos sin animales disponibles, en uso y que han demostrado ser más rentables y eficientes, al tiempo que modelan con precisión la anatomía y fisiología humana. Los simuladores humanos, que van desde la simulación de paciente humano de alta fidelidad hasta el aprendizaje asistido por computadora, crean escenarios inmersivos que imitan casos médicos del mundo real, brindando a los estudiantes capacitación práctica inmediatamente aplicable a pacientes humanos.

Se encuentran disponibles simuladores ginecológicos que van desde capacitadores de tareas parciales hasta sistemas avanzados de realidad virtual. Por ejemplo, los investigadores han validado un modelo de simulación rentable sin animales para enseñar la histerectomía vaginal, y otro estudio encontró que los simuladores de alta fidelidad eran “más baratos que practicar con animales en laboratorios” a largo plazo.

Qué puedes hacer

Tómate un minuto para ACTUAR exigiéndole a OHSU que abandone su capacitación cruel y mortal en cerdos vivos y adopte una política pública que prohíba el uso de animales vivos en su programa de capacitación de residencia en obstetricia y ginecología. Puedes hacerlo enviando comentarios respetuosos a las siguientes personas:

[email protected], [email protected], [email protected], [email protected], [email protected], [email protected]

Puedes usar nuestros puntos de conversación (pero recuerda que siempre es más eficaz usar tus propias palabras):

• En el programa de residencia de obstetricia y ginecología de OHSU, se obliga a los médicos en formación a practicar procedimientos crueles e invasivos en cerdos vivos. Durante estos procedimientos, cortan a los animales, les mutilan los órganos y los someten a otras intervenciones quirúrgicas, causándoles un inmenso dolor y angustia. Los cerdos que sobreviven a los procedimientos son finalmente asesinados.
• Al usar cerdos en lugar de simuladores de pacientes humanos, el personal médico está recibiendo una formación inferior. La anatomía y fisiología de los cerdos son muy diferentes a las de los humanos.
• Hay modelos de simulación avanzados y relevantes para los humanos disponibles, los cuales son más eficaces para la formación de residentes de obstetricia y ginecología. Estos simuladores replican con precisión la anatomía y fisiología humanas, proporcionando una experiencia de aprendizaje más relevante.
• Docenas de programas acreditados de residencia en obstetricia y ginecología han dejado de usar el entrenamiento con animales vivos. En su lugar, emplean simuladores avanzados y relevantes para los humanos, que son iguales o incluso superiores al entrenamiento con animales vivos.

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